Entrevista a la escritora Yolanda Felice
El próximo 30 de noviembre, la escritora Yolanda Felice presentará su último libro, «Las Intocables«, en el Fnac de L’Illa Diagonal, en Barcelona. Apenas un mes y medio después de su lanzamiento, hemos tenido el placer de leerlo y de conversar con Yolanda sobre esta última obra, que se presenta muy diferente a las que ha publicado hasta ahora. «Las Intocables» es un libro singular que consta de tres partes. Empieza con un diario personal de la escritora, algo que nunca había hecho, por lo que se trata de su obra más íntima. Después, Yolanda Felice expande su relato «Snoopy», que forma parte de su primer libro «Caminos de Seducción». Por último, la obra termina con cuatro relatos escritos por las mujeres que acuden al taller de lectoescritura que Yolanda Felice imparte en un centro penitenciario y que la han inspirado a escribir este libro. Puede parecer loco o extraño, pero te aconsejo que llegues hasta el final porque esos cuatro últimos relatos te van a dejar con la boca abierta. En nuestra conversación con una profunda y agradable Yolanda, hemos podido ahondar en algunas anécdotas del proceso de creación de «Las Intocables» y hemos hablado sobre su trayectoria.
¿Qué te inspiró a escribir una obra centrada en un taller de lectoescritura?
Después del confinamiento y al terminar mi séptima obra, «Aislados MMXX», me sentí encerrada en mi habitación durante demasiadas horas. Un perfil de Bookstagram parecía indicarme que existía una comunidad que abogaba por la libertad femenina mediante la creatividad y el activismo, llamada Teta&Teta, la cual regalaba libros a mujeres presas. En ese instante, decidí emprender un taller de lectoescritura creativa para acercarme a ellas. No solo quería enviar libros sin comprometerme, sino que buscaba formas de hacerlas sentir más libres a través de la lectura, conectando con su presente. No critico la participación de actrices y modelos en eventos de estos centros penitenciarios, pero mi objetivo era ir más allá y lo logré. Quería estar presente con ellas, conocer de cerca sus vidas, y así lo hice.
¿Qué desafíos enfrentaste al crear personajes que participan en el taller de lectoescritura?
Estos son algunos de los desafíos:
- Temas sensibles: introducir la exploración de temas profundos y personales que puedan desafiar a las participantes a reflexionar y expresar sus experiencias de manera auténtica.
- Estilos literarios variados: proponer la experimentación con diferentes estilos literarios para fomentar la creatividad y permitir que cada participante encuentre su propia voz única.
- Colaboración en escritura: promover actividades de escritura colaborativa para que las participantes compartan ideas, colaboren en historias y se apoyen mutuamente en el proceso creativo.
- Narrativas empoderadoras: desafiarlas a escribir historias que resalten la fortaleza y resiliencia de los personajes femeninos, inspirándolas a verse a sí mismas de manera positiva.
- Superación de bloqueos creativos: abordar bloqueos creativos mediante ejercicios específicos diseñados para superar obstáculos y liberar la creatividad.
- Escritura autobiográfica: invitarlas a explorar sus propias experiencias a través de la escritura autobiográfica, permitiéndoles compartir sus vivencias de manera terapéutica.
- Presentación pública: ofrecer oportunidades para que las participantes presenten sus escritos de manera pública.
- Exploración de géneros literarios: animar a experimentar con diferentes géneros literarios, desde la poesía hasta la prosa, para ampliar sus habilidades y perspectivas.
Estos desafíos pueden contribuir a crear un ambiente enriquecedor y estimulante dentro del taller de lectoescritura, incentivando el crecimiento personal y literario de las participantes.
Has realizado el taller de lectoescritura en una cárcel de mujeres, sin embargo, en Las Intocables te refieres a ella como un “colegio”, ¿por qué motivo?
No quiero juzgar a nadie. Con este libro, no pretendo dar a conocer a las internas ni que esto genere morbo. El libro debe ser blanco, transparente, puro y lleno de valores.
¿Puedes compartir alguna anécdota interesante o divertida relacionada con la impartición del taller de lectoescritura que influyó en la trama?
Hay miles de anécdotas y diferentes tramas ya que es una novela armada a partir de tres vertientes o grupos de textos. El primero de ellos consiste en un diario íntimo que yo misma voy confeccionando a mi propio ritmo, a medida que pasan los días y las ganas de escribir se presentan. Las páginas se convierten en pequeños propósitos donde encontráis apartados detallados por títulos. La última vertiente se trata de los relatos de Las Intocables, donde cuatro mujeres son capaces de transformar generaciones a través de la literatura. Deberéis leer la obra y encontrar por vosotros mismos las anécdotas que se van dando.
¿Cuál dirías que es el mayor aprendizaje que te has llevado de tu experiencia en el taller de lectoescritura con “las intocables”?
Emocionalmente ha sido un impacto para mí. He aprendido muchísimo a no tener miedo, a no tenerles miedo. Siempre aprendes, de alguna manera, en todo lo que haces en tu vida, pero entrar en un sitio así han sido muchas experiencias, mucho aprendizaje con ellas y, sobre todo, me han quitado el miedo y muchas manías que yo tenía. Siempre he sido una persona muy prudente, muy correcta, no soy una persona de abrazarme y darme besos con la gente y ellas me han enseñado a abrirme a otro tipo de sentimientos y de emociones porque venían, me abrazaban y me cogían. Así que me han enseñado a abrazarlas cuando las veo, a besarlas y a cogerles cariño.
¿Cómo integras tu experiencia profesional en la trama de la novela?
En un apartado titulado «Colegio».
Después de ocho obras publicadas, ¿cómo ha evolucionado tu estilo de escritura?
Se puede comprobar en un relato titulado «Snoopy», parte de mi trabajo en 2011 con mi primer libro «Caminos de Seducción». Podréis apreciar el enorme esfuerzo que me ha llevado mejorar mi forma de escribir. Hace años, me hice una promesa a mí misma: mis primeros libros seguirían generando conversaciones y no permitiría que ninguna librería los retirara de su catálogo. Puede que sea un poco insistente, pero… «Snoopy» resultó ser breve en ese momento, demasiado breve, al igual que todo lo que solía crear como autodidacta sin experiencia literaria en aquel entonces. Por eso, he decidido expandir su historia en este nuevo libro para que se aprecie mi evolución y experiencia.
¿Cómo ha influido ser PAS en tus libros o proyectos?
Soy una PAS y nunca he querido reconocer mi alta sensibilidad hasta ahora. Escribía mis libros a través de mujeres fuertes, locas, kamikazes, personajes que inventaba. No me arrepiento de nada; he aprendido a conocerme y a ser una superviviente de la literatura. Hoy mi salud es muy frágil. Muchas lectoras me preguntan si detrás del personaje estoy yo. A veces sí y otras no. El género de ciencia ficción me apasiona y puedo manejarlo como una de las mejores herramientas que me ha dado mi mente y mi alta sensibilidad. Todo pasa por algo.
¿Tienes alguna obra literaria favorita de entre las que has escrito? Si es así, ¿por qué?
Sí, «L’éveil de Madame Isabel». La escribí en 2017 y anticipé la llegada de mi gran amor. Sin conocerlo de nada, ya tenía una historia para él. Por otro lado, es mi primera obra de terror y me fascinó escribir sobre vampiros. Es una historia que os recomiendo. Hasta yo tenía miedo cuando me iba a dormir, y enseguida comencé un cuento infantil llamado «Pablo y los superhéroes» para quitarme tanta información terrorífica…(risas).
Todos tus libros están dedicados por el escritor Paulo Coelho, que ha sido tu mentor, ¿cuál dirías que es el mayor aprendizaje que te ha aportado?
Paulo Coelho me brindó la mayor herramienta de mi vida: la escritura. Me trajo luz a mi existencia en un mundo difícil de esfuerzo y sacrificio, donde casi nadie valora el gran trabajo que se realiza a diario. Me acercó al verbo, a la palabra, y aún más a Dios.
Haces mucha alusión a tus libros, lo cual es lógico, pero ¿qué obras o autores te inspiran?
Mis historias no están inspiradas en ningún autor; son propias. Sin embargo, me gusta leer libros que me aporten y me hagan pensar. No podría mencionarte autores específicos, ya que hay muchos y sería injusto nombrar solo algunos. Pero en mi nueva obra, «Las Intocables», hago referencia a Mario Levrero.
¿Qué consejos darías a escritores novatos basados en tus experiencias como autora y profesora de escritura?
No puedo ofrecer consejos; no soy profesora, aunque imparto un taller de lectoescritura que he creado basándome en la experiencia de dos años de trabajo en un centro penitenciario con mujeres que están desarrollando, a través de este taller, un poder extraordinario llamado lectura. Leer es poder.
¿Cómo te sientes al haber alcanzado la marca de ocho obras publicadas en tu carrera literaria? Intocable.
¿Tienes proyectos literarios futuros que te gustaría compartir con tus lectores?
Quiero vivir pensando que volveré a escribir. Quiero vivir con la esperanza de regresar con un nuevo proyecto social que me enriquezca como persona y aporte un granito de luz a esta sociedad. Quiero volver.
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