Una escuela especial para los niños de Guinea Bissau
Nuestro magazine no sólo reúne las últimas tendencias, sino que es un medio de comunicación que fomenta las relaciones entre lectores y proyectos sociales. Por eso, decidimos aunar nuestras fuerzas con la Fundación Iván Mañero para colaborar activamente con su causa.
¿Por qué Fundación Iván Mañero? Creemos que los niños son el futuro y que la atención sanitaria, educación y formación es un derecho, no un privilegio. Por tanto, confiamos en poder aportar nuestro granito de arena a la causa y servir como plataforma de divulgación de todos sus proyectos solidarios.
Hace más de 10 años que la ONG AMIC, ahora junto a la Fundación Dr. Iván Mañero (DrIM), llegó a Guinea Bissau para ayudar y trabajar codo con codo con la población por un objetivo común, mejorar las condiciones de vida, principalmente, de los niños y las mujeres de este pequeño país africano..
Durante 2015 y 2016, el programa de “Atención a la Infancia en riesgo” quiere hacer especial hincapié en cuatro proyectos principales: luchar contra la desnutrición infantil, mejorar la atención sanitaria de los más pequeños, conseguir que ningún niño se quede sin escuela y mejorar la atención de los niños con discapacidad.
UNA ESCUELA ESPECIAL
Así es como se podría definir la Escuela Taller de Biombo: Una escuela especial para niños con dificultad de aprendizaje. Esta escuela, donde se trabaja con niños desde los 8 a los 18 años, tiene una doble función: por un lado, ofrecer educación primaria, dentro de un programa de garantía social, a niños con graves dificultades de aprendizaje y riesgo de exclusión social, que no son capaces de seguir la enseñanza reglada que se da en la escuela comunitaria que AMIC y FDrIM, junto a Casa Emanuel, gestionan y donde ofrecen una enseñanza de calidad a más de 500 alumnos.
Los niños de la Escuela Taller reciben educación primaria desde diferentes vertientes y metodologías innovadoras para que puedan alcanzar unos conocimientos básicos e imprescindibles para su futuro.
Pero al mismo tiempo, se les ofrece formación profesional en diferentes campo: comercio, tareas de mantenimiento (electricidad, fontanería, carpintería,…), costura, agricultura y ganadería sostenibles, etc. para ofrecerles un oficio.
Durante el 2015 y 2016, se quiere ampliar el programa piloto ofreciendo un apoyo psicopedagógico más profundo a estos niños, pues todos ellos han vivido experiencias muy duras en su vida (abandonos, abusos, malos tratos, etc.). Además, se quiere poner en marcha los nuevos talleres de Mecánica y de Costura, para ofrecer más posibilidades a estos niños. En estos talleres no solamente se les ofrece los conocimientos propios de estos oficios, sino también a llevar un pequeño negocio, una contabilidad, organización, higiene, etc. Para que su formación garantice que una vez lleguen a la edad adulta tendrán suficientes herramientas para romper el círculo de pobreza en el que se encuentran inmersos y puedan, además, contribuir al desarrollo de la economía de su país.
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