Tratamientos estéticos agradables: la química de la felicidad

¿Por qué a la hora de elegir productos o procedimientos preferimos los que no sean agresivos?
La respuesta corta: porque el placer genera felicidad, y ser felices nos hace bellos.

Todo lo que nos genera placer y bienestar estimula la producción de hormonas que nos producen sensación de felicidad. Las cuatro hormonas clave para nuestro estado anímico son: dopamina, oxitocina, serotonina y endorfina.

Por todo lo que nos cuentan las hormonas creemos que un tratamiento estético debe ser agradable. Debe generar paz y tranquilidad.

Kenko Organic

Nuestro organismo está formado por células y estando sanas funcionan de manera óptima, Kenko Organic sabe muy bien de esta ciencia ya que a través de sus tratamientos logran retrasar el envejecimiento lo más tarde y mejor posible.

La promesa de KENKŌ organic: tratamientos, productos, ambiente y trato que lograrán acompañarte en la búsqueda de tu mejor versión. No prometen no envejecer pero si hacerlo con dignidad.

TRATAMIENTOS ESTÉTICOS AGRADABLES

La química de la felicidad

La dopamina

Está relacionada con la motivación y con el sistema de recompensa.
Lo hace a través del aumento de la frecuencia y presión cardíaca, la regulación de la atención y del sueño y de la actividad motora.

La oxitocina

También conocida como “la hormona del amor” nos permite generar vínculos con otras personas, haciendo que seamos capaces de sentir cariño y empatizar.
Sus efectos en el organismo son: disminución de la tensión arterial y el ritmo cardiaco, mejora de la cicatrización, reducción de la tensión muscular y aumento del umbral del dolor.

La serotonina

Es responsable del equilibrio emocional, controla la temperatura corporal y el apetito.
Para poder producir esta hormona es necesaria otra sustancia llamada triptófano. Se puede obtener de ciertos alimentos como la pasta, el arroz o los cereales, como también se puede producir mediante la práctica regular de ejercicio o técnicas de relajación.

La endorfina

Muy parecida a la morfina, funciona como un analgésico natural. Se liberan en áreas del cerebro que están en el centro del dolor. Además, suele aparecer cuando haces ejercicio, cuando estás excitado y expectante; o cuando comes picante o chocolate puro. Su aumento mejora las prácticas sociales y el trabajo en equipo.

Efectividad con los tratamientos estéticos agradables

No podemos dejar de lado los resultados ya que el primer objetivo de KENKŌ organic es la eficacia en los tratamientos y productos. Pero una cosa no puede ser sin la otra.

KENKŌ organic nos cuenta que:

Tocar un cuerpo es una gran responsabilidad y lo hacemos con mucho respeto. Tocar un cuerpo es contacto, es afecto, es transmitir bienestar.

Kenko Organic

Si además sumamos terapias de comprobados resultados, como el drenaje linfático manual, la radiofrecuencia Indiba, presoterapia, fototerapia, y la aplicación de productos 100% orgánicos y naturales del prestigioso laboratorio Phyt’s, creamos el combo perfecto de bienestar, salud y belleza.

Tratamientos estéticos agradables versus tratamientos estéticos agresivos

La cara b de los tratamientos agradables son los tratamientos estéticos agresivos, que queman, duelen, pinchan, pican, en mayor o menor medida producen una situación de estrés en nuestro organismo que es innecesaria. Y no por ello sus resultados son mejores. Al contrario. Podrán tener algún beneficio a corto plazo, pero a mediano y largo plazo siempre van a ser perjudiciales.

Si las cosas fueran fáciles no serían difíciles. Si con un procedimiento de una vez al año, o dos o tres, por más fuerte que este sea, fuera suficiente para lograr el resultado deseado, no existiría el esfuerzo del cuidado constante y saludable.

Es como querer lograr un cuerpo tonificado haciendo una clase de gimnasia por año. Y todos sabemos que eso no existe. Porque en definitiva la piel, el tejido adiposo, el tejido conectivo, el sistema circulatorio, el sistema digestivo, el nervioso, el inmunológico, etc,. todos están formados por células. Y al igual que las células de los músculos, necesitan estímulos saludables constantes.

La claves es no buscar resultados mágicos ni promesas de juventud eterna.