Sororidad laboral entre mujeres

Sororidad es sinónimo de solidaridad entre mujeres. Se trata de un vínculo femenino a nivel mundial que sirve de apoyo para luchar contra la desigualdad, la violencia de género y las diferencias salariales.   

El concepto cuenta con muchas seguidoras y seguidores, aunque también hay quien no está de acuerdo. Lo cierto es que cada vez son más mujeres las que se unen a él, y cada vez se emplea con mayor frecuencia en redes sociales y medios. 

Desde aquí vamos a hablar sobre la sororidad laboral, ¿qué es y para qué se emplea?

¿Qué es la sororidad laboral?

El debate sobre la igualdad lleva abierto desde hace mucho tiempo. Aunque la palabra sororidad laboral es algo nuevo que está cogiendo peso en las reivindicaciones de la mujer en el mundo laboral.

Aún vivimos en una cultura patriarcal dotada de muchas desigualdades contra las que hay que luchar. Los colectivos femeninos han unido sus fuerzas para combatir la falta de igualdad, abogando por el fin de la precariedad laboral, la brecha salarial y el techo de cristal asociado al ascenso laboral.

Asimismo, se solicitan medidas de conciliación con carácter de urgencia. Pues forma parte de uno de los principales problemas que viven las familias actualmente. 

Aún queda mucho por hacer y la desigualdad entre hombres y mujeres en el ámbito laboral aún impide su progreso. Es preciso acabar con esa barrera y potenciar el empoderamiento económico de la mujer. 

Las féminas contribuyen significativamente con la economía mundial, sin embargo, siguen padeciendo la falta de oportunidades en un mundo aún dominado por hombres.

Tips para reducir las desigualdades laborales 

Si te preguntas cómo fomentar la sororidad laboral en un equipo de trabajo o en el entorno laboral, estas son algunas ideas:

• Respetar las decisiones de la mujer sobre su cuerpo y acabar con la discriminación hacia las mujeres embarazadas. 
• Espacios seguros para su desarrollo profesional y personal. Las empresas deben concienciar a todos sus trabajadores para crear un ambiente de igualdad y respeto. Debe existir un trato laboral justo y saludable, que permita que la mujer siga creciendo. 
• Olvidarse por completo de los prejuicios. Los prejuicios y las críticas hacia la mujer deben acabar. Eso es algo esencial para permitir que cualquier empresa avance y progrese. Para hacerlo posible, se deben adoptar políticas de género integrales con las que generar oportunidades iguales para todos. 

Tanto en la oficina como en casa, la mujer debe se debe respetar. Es preciso fomentar este tipo de hermandad que motive la implantación de políticas y acciones que satisfagan a la mujer a nivel personal y laboral.