Remedios caseros para tratar los codos secos
Con mucha frecuencia, todos solemos padecer el “mal” de los codos secos. A pesar de que nos apoyamos, de forma constante, sobre ellos, los codos son los grandes olvidados de nuestro cuerpo. Y es que, al no verlos, no solemos procurarle los cuidados que se merecen. Por eso, hoy te presentamos tres remedios caseros para poner fin a tus codos secos.
Bicarbonato de sodio para blanquear
Es un ingrediente que muchas personas tienen en casa, ya sea para cocinar o para tratar manchas tanto en la ropa como en el hogar. Y lo cierto es que, del mismo modo que se deshace de la suciedad, también puede hacer milagros con las células muertas de la piel.
Si quieres usarlo para blanquear tus codos secos, debes mezclar una cucharada de bicarbonato de sodio con una cuchara de leche. Cuando obtengas una pasta, masajéala sobre tus codos durante unos minutos y enjuágala con agua tibia.
Repite este proceso una vez al día durante un par de semanas y no tardarás en ver los resultados.
Miel para los codos secos
La miel es otro de los grandes aliados de la medicina natural y es que tiene un potente efecto antiinflamatorio y antiséptico. Además, tiene propiedades hidratantes, gracias a su riqueza en minerales imprescindibles para la piel.
Te recomendamos que pongas dos o tres cucharadas de miel en una cacerola y la calientes un poco. Es muy importante que la temperatura se mantenga baja para que la miel no pierda sus principios activos. Cuando la pasta esté lista, aplícala sobre los codos y déjala actuar durante 30 minutos. De nuevo, retira la miel de la piel con agua fría y seca la zona con una toalla.
Adiós a los codos secos en pocas aplicaciones, gracias al potente efecto hidratante de la miel.
Aceite de oliva para las asperezas
Es uno de los ingredientes más usados en los remedios de las reboticas de nuestras abuelas, y por algo será. El aceite de oliva no solo es efectivo ante las puntas secas del cabello, sino también para la piel. Y es que su densidad favorece a que la piel sea capaz de conservar su humedad, además de aportarle muchos nutrientes.
Calienta unas cucharadas de aceite oliva en una cazuela a fuego muy bajo. Cuando esté tibio, aplícalo sobre la piel de los codos secos y masajea la zona durante 30 minutos. Y, otra vez, enjuaga la zona con agua tibia sin frotar demasiado fuerte.
Notarás el cambio a los pocos días.
