Posturas de yoga para activar la circulación
El yoga es una disciplina que ha ido ganando muchos adeptos a lo largo de los últimos años y que mezcla las competencias físicas junto con las espirituales para alcanzar un buen nivel de bienestar.
Se trata de una de las seis dárshanas ortodoxas del hinduismo, aunque actualmente se practica en todo el mundo como un deporte o un estilo de vida saludable más, ya que sirve para muchas cosas, por ejemplo, las posturas de yoga para activar la circulación.
Si tienes problemas con este aspecto de tu cuerpo presta atención, pues te vamos a mostrar cómo mejorar con este ejercicio.
Posturas de yoga para la circulación
De entre todos los aspectos positivos del yoga, existen algunas posturas concretas que van a mejorar considerablemente la salud de aquellas personas que sufren problemas de circulación.
El gato – vaca
Las posturas denominadas en yoga como el gato y la vaca realizadas sucesivamente son muy positivas para ir activando el cuerpo progresivamente. Se trata de poner el cuerpo en cuatro apoyos sobre el suelo y arquear o redondear la espalda.
Viparita Karani
Esta es una postura de yoga buena para la circulación y muy sencilla incluso para los más principiantes, pues solo se trata de poner las piernas estiradas a lo largo de una pared. Lo ideal es apoyar la espada en algo cómodo como un cojín.
La postura del triángulo
Esta postura implica a todo el cuerpo, ya que con las piernas abiertas y posando la mano en el suelo se hace esta figura geométrica. Si se hace con suavidad, es agradable y accesible para todos los niveles.
Salamba Sirsasana
Esta es una de las famosas asanas de yoga y se trata de un ejercicio estupendo para mejorar la circulación. En ella tu cuerpo estará completamente al revés: la cabeza en el suelo y las piernas en el aire.
¿Cómo ayuda el yoga para activar la circulación?
El yoga es un ejercicio suave que involucra a todo el cuerpo y que puede ser excelente para la circulación, especialmente cuando se llevan a cabo las posturas invertidas.
Esto hace que las piernas estén elevadas, algo habitualmente recomendado para las personas con este tipo de problemas.
Lo mejor es que las posturas que te hemos mostrado y que son buenas para tu cuerpo, especialmente para tu circulación, son de las más sencillas. Cualquier persona que cuente con un poco de ganas, de tiempo y con el espacio adecuado puede hacer pequeñas series con estos ejercicios e ir sintiéndose mejor con el tiempo.