La influencia del arte en el Feng Shui
La influencia del arte
El arte como todos sabemos es una expresión profunda del conocimiento y alma del ser humano, por ello, dentro de la influencia del arte en el feng shui se presta mucha atención a su simbología y significado.
Una pieza de arte ya sea un lienzo, cuadro, mural, escultura o cualquier forma artística que tenga suficiente protagonismo, puede amplificar o empobrecer la belleza de un espacio de manera muy especial. Y puesto que tenemos en cuenta el significado, su impacto puede ser más profundo que observando únicamente la parte externa o estética.
Una buena pintura, por ejemplo, puede atraer luz y mayor profundidad a su vivienda, llenar de optimismo y fuerza una habitación, y con ello focalizar los mejores pensamientos e inspiración. La cuestión está en reconocer directamente lo que constituye una pieza con buen Sheng Chi (energía armónica) o Sha Chi (energía desfavorable), como diría un maestro de feng shui.
La calidad del Chi
No pienses que una obra artística es buena para ti, únicamente por su fama internacional, por su precio, o por lo conocido que sea el artista que la creó.
La obra puede ser técnicamente original o única en algún sentido, pero también ha de importarte el motivo e inspiración que te transmite. Imagina que compras una obra imponente de un pintor célebre y el motivo es una guerra sangrienta, un personaje triste o sombrío o un lugar oscuro. Verás qué inunda y atrae a tu espacio, ese sentimiento y sensación.
En la mayoría de estudios que realizamos, las pinturas o imágenes suelen hablar de motivos psicológicos por los que los inquilinos sienten afinidad. Suelen elegir colores y representaciones que son ventanas a sus estados internos.
El poder del color
Algo importante en cualquier pieza de arte además de su simbolismo es la calidad de los colores. Por ejemplo, en las pinturas que son como ventanas, no se recomienda la abundancia de tonos oscuros como rojos espesos, verdes apagados, grises, cárdenos y colores con poca luz, ya que están asociados a un tipo energía más pesada y triste.
Trazos desordenados y caóticos o pinturas abstractas que no tienen pies ni cabeza se asocian a estados mentales y emocionales confusos. Si tienes cuadros observa bien sus tonos y lo que representan. Busca la belleza en las pinturas, sentimientos y valores nobles, motivos que ayuden a emerger un alma alegre.
El arte que contiene cargas simbólicas muy fuertes en ocasiones es mejor que tenga un espacio de contemplación distinto, como una sala de arte o museo, un lugar público de contemplación.
Formas y esculturas
Mucho de lo que se ha dicho sobre pinturas se puede trasladar de forma natural a las esculturas. No es buen consejo, siguiendo la escuela de la forma, exponer figuras que evidencian una falta clara de armonía. Por ejemplo: cuerpos mutilados, figuras amenazantes o violentas o bustos de personajes tétricos o problemáticos. Son muchos los detalles a descubrir con una observación minuciosa.
Aumenta la luz
Siendo conscientes de la dificultad que conlleva sopesar una pieza de arte y las diferentes sensibilidades, el consejo básico es seguir las pautas de feng shui y crear puntos focales donde abunda el «Sheng Chi». Eso suele evidenciar casi siempre por una belleza intrínseca, por la nobleza interior del artista, por el recuerdo simbólico de lo positivo, en definitiva, por la clara luz que puede atraer a su espacio.
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